1. Despilfarro por sobreproducción: se produce por encima de la demanda, como por ejemplo preparar demasiada comida para ahorrar en algunos conceptos (economías de costes). La comida preparada se iría consumiendo poco a poco por los clientes, pero al cabo de unos días no tendría ni el mismo sabor, ni la misma textura y, por tanto, ni la misma calidad. Y eso si termina vendiéndose en su totalidad. Los clientes que probasen el plato en los últimos días de consumo no quedarían satisfechos, lo cual la economía de costes no compensaría el resultado final. Eso mismo ocurre en muchos hogares, donde se cocina para varios días mermando en la calidad a medida que pasa el tiempo.
2. Despilfarro por tiempo de espera: cuando un cocinero se detiene a esperar a que el horno de caliente o si ya el plato se encuentra satinándose dentro del mismo. Esta espera es un tiempo perdido que podría dedicar a otras tareas dentro de la cocina. Nadie puede estar parado esperando a que le traigan cualquier cosa que le falte. Puede ir a atender otras mesas, limpiar el mostrador, recoger platos,... Hay que intentar que todas las operaciones se sincronicen para que haya un flujo constante sin esperas.

4. Despilfarro por movimientos innecesarios: en este caso se refiere al movimiento del cocinero, por ejemplo para recoger algún utensilio (una espátula), recorridos largos para llevar y traer alimentos (quizás pudiera hacerse mediante un pequeño ascensor montacargas o transportadoras de cinta, lo cual nos podría llevar nuevamente a un transporte innecesario si la distancia es larga, o bien que otro cocinero recorra el tramo final de la ruta hacia el cliente). Está, como en el caso anterior, relacionado con la distribución o layout de la cocina y el reparto correcto de tareas en la organización. Un camarero puede no hacer bien su trabajo moviéndose más de la cuenta (hace varios viajes para atender a diferentes mesas, cuando en un único viaje podría atender a todas ellas).
5. Despilfarro por sobreproceso: procedimiento más allá de lo exigido por el cliente o bien utilizar procedimientos inadecuados, como por ejemplo para la elaboración de los productos: mala disposición de la cocina, utensilios alejados del cocinero, mesa de trabajo mal dispuesta (demasiado alta o baja), excesiva información para realizar los pedidos, mala capacitación del personal (cocinero inexperto o poco capacitado), tipo de equipamiento utilizado (utensilios inadecuados).
6. Despilfarro por exceso de inventario: cantidades almacenadas de pasta, carne u otros ingredientes. Estos ocuparían un lugar específico en el frigorífico y en la despensa. También gran cantidad de productos ya preparados en cocina más allá de lo que se precisará de forma más o menos inmediata.
7. Despilfarro por defectos: una bandeja de comida que se ha quemado por estar demasiado tiempo en el horno, provocando la repetición del proceso. La consecuencia: pérdida de materia prima y retraso en la entrega. Si la bandeja ha salido del horno con la comida todavía cruda, es necesario volver a calentarlo (retroceso). Hay que asegurar la calidad con dispositivos poka yoke (a prueba de error).
8. Despilfarro por la creatividad desaprovechada: hay que convocar reuniones para escuchar a los camareros y a todo el personal del restaurante para que expongan sus impresiones, puesto que son los que están viviendo el día a día del negocio y conocen lo que demanda el cliente, así como las necesidades que se deberían satisfacer.